CÓMO CUIDAR TU PISCINA CON LA LLEGADA DEL VERANO
El verano es la época del año en que el cuidado, mantenimiento y limpieza de tu piscina adquiere mucha más importancia que cualquier otra estación del año.
El elemento principal de la piscina es el agua y mantenerla limpia y clara todos los días es el gran objetivo. Para ello hay que revisar diariamente los niveles de PH y asegurarse de que estos se sitúan entre 7 y 7,6. Fuera de estas cantidades, puede haber problemas como irritaciones en la piel y ojos de las personas.
La herramienta para medir el nivel de PH de agua es el fotómetro. Otro factor muy importante en el mantenimiento de piscinas es la desinfección, una labor que evita la aparición de suciedad o algas y otros problemas. Estos niveles se regulan mediante el uso periódico de pastillas de cloro, cuya cantidad depende del fabricante y del tamaño de la piscina. Lo aconsejable es colocar el cloro por la noche, ya que nunca hay que aplicarlo si hay alguien dentro del agua y eso facilita las tareas de limpieza al día siguiente.
El mantenimiento de piscinas en verano también incluye las tareas de limpieza realizadas por la depuradora, que debe estar en funcionamiento durante al menos seis horas al día para garantizar una limpieza correcta.
Se encarga de recoger hojas, insectos y suciedad acumulada en las paredes y en el fondo. Al igual que en el caso del cloro, lo recomendable es programar el motor para que funcione durante la noche. Para facilitar esta tarea, hay que pasar el limpiafondos y retirar la suciedad acumulada en la superficie antes de cada baño.
Una herramienta muy útil para realizar la limpieza de las paredes y el fondo es un robot, también conocido como pulpo. Se puede poner en marcha un par de veces a la semana para retirar la suciedad que se queda incrustada y el resto de cloro.